Bandai, el gigante juguetero nipón
Francisco Imbernón
¡Me ha costado pero al fin la he encontrado! Este edificio es enorme, he tendido que pasar por varias plantas con tiendas de videojuegos y una dedicada a DVDs de dudosa reputación. Al entrar, apenas puedo caminar por uno de los pasillos de esta tienda de segunda mano, sus estanterías están repletas de figuras, gachapones, y todo tipo de merchadising, un paraíso para cualquier otaku que se precie.
Al doblar la esquina me encuentro con una montaña de maquetas de Gundam, perfectamente ordenadas formando una pared de ladrillos de cartón, donde un logotipo rojo muy característico firma casi todos los productos de este local de Akihabara. Hoy os hablo de Bandai, el gigante juguetero nipón.
Del flotador al Gundam escala 1:1
Hay muchas formas de conocer la cultura nipona, pero quizás el Media Mix sea el altavoz que más se ha escuchado entre adolescentes desde el país del sol naciente. Un Media Mix formado por videojuegos «gemu», anime, manga pero sobre todo merchadising, donde la compañía juguetera Bandai es el referente del sector.
De una pequeña fábrica de juguetes en Tokyo, a una compañía internacional que facturó en 2020 alrededor de 7000 millones de dólares. Establecida en 1950 bajo el nombre de Bandai-ya fue fundada por Naoharu Yamashina, comercializando principalmente todo tipo de modelos de coches metálicos y «flotadores».
Al igual que ocurrió con otras compañías niponas tras la Segunda Guerra Mundial, Bandai fue partícipe del conocido «milagro económico japonés», una época donde se produjo el mayor crecimiento económico del país en toda su historia, propiciado principalmente por la mano de obra barata, la guerra de Corea, y a tener a los Estados Unidos como principal cliente del país. Actualmente es junto a las compañías norteamericanas Mattel y Hasbro, líder en el sector mundial del juguete.
Bandai y su apuesta por un desconocido anime llamado Gundam
El punto de inflexión se produjo en 1980, con la llegada a la dirección de Bandai de Makoto Yamashina, descendiente directo del fundador. Makoto cambió la estratégia ventas y renovó a la mayor parte del personal, apostando por la gente joven y las nuevas ideas.
Uno de los nuevos proyectos fue la creación del primer kit de montaje de la serie de animación Gundam. Una figura a escala 1:144 del robot protagonista: Amuro Ray’s RX-78-2. El éxito del juguete fue tal, que catapultó a la serie de televisión con excelentes datos de audiencia, y actualmente es uno de los iconos de la cultura POP nipona.
En 1983 con la aparición del anime Musculman (kinikuman), Bandai adquirió su licencia para producir muñecos de goma basados en sus personajes principales. En este caso el éxito fue debido a su distribución en máquinas expendedoras, Gachapones. Con un precio reducido de venta, en torno a los 100 yenes y saliendo de la máquina al azar, las convirtió en altamente coleccionables teniendo en cuenta su simplicidad: modelos pequeños, con poco detalle y de un solo color.
Actualmente en Japón, Bandai tiene más de 360.000 máquinas Gachapon instaladas, y podemos encontrar colecciones de prácticamente cualquier cosa, y créeme que es cierto cuando digo cualquier cosa.
Dentro de su desarrollo internacional, no podemos dejar pasar el Tamagotchi , la primera mascota virtual. Un pequeño llavero con forma de huevo, que hizo las delicias de todo niño alrededor del mundo con unas ventas de más de 82 millones de unidades. Sin duda otro icono pop global de la década de los 90.
El éxito de Bandai basado en las licencias
Si eres otaku y tienes algún tipo de merchandising de tu serie o videojuego favorito, los más probable es que tenga el sello de Bandai: Caballeros del Zodíaco, Sailor Moon, Dragon Ball, One Piece, la lista es interminable.
Lo cierto es que Bandai prácticamente «monopoliza» las licencias de las series anime de éxito, actualmente más de 70, para comercializar todo tipo de productos relacionados.
Algo de lo que fue consciente después del éxito conseguido en 1965 comercializando los juguetes del popular anime Astroboy, basado en el manga de Osamu Tezuka.
Desde ese momento esa ha sido la hoja de ruta de la compañía, incluso como un punto de diferenciación respecto a la competencia en otros sectores.
Aunque ya hablaremos más adelante, una de sus primeras incursiones en el mundo de los videojuegos fue con la consola portátil WonderSwan, donde centró su catálogo de juegos en títulos de los animes más populares de los que ya poseía la licencia para intentar competir con Nintendo y su majestuosa Game Boy.
Gunpla y el mundo de los Model kits
Como ya hemos mencionado antes, uno de los hitos de la compañía fue la creación de los plastic kits de Gundam o Gunpla (Gundam plastic model).
Modelos reconocidos en todo el mundo, no sólo por los fans de la serie, sino por los amantes del modelismo. Alrededor de 714 millones de unidades vendidas desde 1980 lo avalan.
Sus modelos se caracterizan por el gran detalle de sus partes, pero sobre todo por la simplicidad de montaje.
Como amante de los Gunpla, te puedo asegurar que las instrucciones se pueden seguir perfectamente aunque no tengas conocimientos del idioma japonés.
Por supuesto existen diferentes gamas, con escalas y calidades diversas, desde pequeños modelos de 5cm hasta de 31cm.
Aunque si vamos a hablar de escalas, no podemos pasar por alto la majestuosa figura de 17m de altura (escala1:1), que actualmente se encuentra en el Bandai Gundam Factory de la ciudad de Yokohama.
Una maqueta a tamaño real que puede moverse y caminar; eso sí ligeramente, todo dentro de un espectáculo preparado para los visitantes.
Bandai-Namco y su inmersión en el mundo de los videojuegos.
Como muchas otras compañías, Bandai siempre ha basado su estrategia comercial en la diversificación. A pesar de que su mercado siempre ha estado centrado en mundo del juguete, ha tenido acercamientos hacia el sector de los videojuegos con productos exclusivos en el país nipón, como la portátil Wonder Swan o la Playdia, ambos intentos con un resultado bastante desastroso.
En el año 2005, su fusión con Namco, creadores del mítico Pac-Man o Tekken, dieron lugar a la actual Bandai-Namco. Un compañía centrada en el software que actualmente es responsable de éxitos como Tekken 8 (2024), Little Nightmares II (2021), Dragon Ball Z: Kakarot (2020), etc., siendo esta última franquicia la más explotada, especialmente en el mundo de los juegos arcade de cartas: Super Dragon Ball Heroes arcade.
Si no los conoces, son videojuegos arcade que utilizan cartas digitales que se colocan sobre una pantalla de la máquina recreativa a modo de tablero. Estas son detectadas por la máquina e interactúan en el juego con unas mecánicas de pura estrategia.
Este juego de Bandai se ha convertido en una propia franquicia desde su lanzamiento en 2010, con más de 1000 modelos de cartas distintos y todo tipo de merchandising.
Bandai y su futuro como un Media Mix propio
Si empezábamos hablando de los puntos de acceso a la cultura popular con el Media Mix como eje central, y tras mostraros parte de la trayectoria de la compañía, no es extraño pensar que lo que realmente pretende Bandai es ser un propio Media Mix. El conglomerado empresarial formado por Bandai consigue abarcar todas las vertientes, desde merchandising, videojuegos, parques de atracciones o incluso el anime, esta gran compañía nipona parece no tener límites.
Así que, ¡atento Otaku! Revisa tus cosas, porque puede que más de las que creas tengan el sello de Bandai.
